El cantante de Yerba Brava no declaró en la causa por tráfico de drogas y seguirá preso

Cristian Espinoza, el cantante del grupo Yerba Brava, llevaba 700 gramos de cocaína en su estómago y otros 300 escondidos entre la ropa cuando lo detuvieron la semana pasada en el aeropuerto Jorge Newbery a punto de abordar un vuelo hacia Río Grande. Este lunes se negó a ser interrogado por el fiscal del caso, Jorge Di Lello, y seguirá preso.

La Justicia dispuso el secreto de sumario en la causa que investiga al líder de la banda de cumbia por tráfico de drogas. Tras someterse a un lavaje de estómago en el Hospital Fernández, Espinoza fue trasladado a la cárcel de Ezeiza donde permanece alojado.

El músico fue descubierto por los efectivos de la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA) al hacerle el "cacheo" de rutina. Entonces advirtieron que en su ropa interior, oculta entre sus genitales, llevaba 300 gramos de cocaína.