Nicole Neumann celebra veinte años como modelo

La modelo cuenta en la entrevista que cuando empezó su carrera fue un gran impacto por su edad. “Yo quería ser veterinaria o bióloga marina, andar a caballo. Pero hacía comerciales en televisión. Un día fui a un casting y me dijeron: ´Das mas grande, no pareces de 11, ¿nunca pensaste en ser modelo?´ Salí de ahí y empecé a taladrar a mi mamá: ¡Quiero quiero! Las primeras fotos que hice fueron una revolución. ´Lolita, sexy a los 12´” Que su madre la obligaba a trabajar es una fantasía, “La volví loca hasta que me llevó a una agencia de modelos”. Si bien tuvo conflictos en el pasado, actualmente con su mamá está bien; “Ella estuvo en el cumple de Indiana, festejamos el día de la madre. Siempre fue una relación conflictiva, pero nos vemos seguido”.En cuanto a la relación con su hermana Geraldine dice: “Me encantaría tener ese amor de hermana, esa lealtad, la cosa incondicional, pero no lo tengo. Nunca lo tuve, por eso no lo extraño” La modelo conoció a su padre recién a los 18 años, “A los 15 empecé a recibir cartas de mis abuelos desde Austria. Ellos me escribían en alemán y mi mamá me las leía. Creo que ellos me iban tanteando para ver como reaccionaba, hasta que me llegó una carta de mi papá. Cunado cumplí 18 me fui a vivir a París, y ahí quise conocerlo. Un día sonó el teléfono y cuando dije: ‘¿Quién habla?´, él me respondió ´Tu papá´.Nicole cuenta que nunca tuvo bronca y que siempre valoró el hecho de que él quisiese acercarse “es un hombre sencillo, súper cariñoso y buena onda”. En cuanto a su rol de madre dice que todo es un antes y un después, “¿Cómo entes podía decir que me sentía completa? ¿Ahora soy una mujer plena!”Dice que su marido, Fabián cubero, es el hombre ideal. “Es súper compañero, alegre, siempre empuja para adelante y le encuentra el lado positivo a las cosas. Es una persona muy sana, tiene un corazón de oro. Me ayuda con las chicas, es un padrazo”. En cuanto a sus hijas, dice que no dejaría que fueran modelo a los 12 años como lo hizo ella. “Yo tuve la suerte o el don de ser centrada, quiero que ellas vivan cada etapa de sus vidas sin apuros. Ahora las chicas de 12 vuelan y ni se me ocurriría meterlas en el mundo de las modelos. Me gustaría que ellas vivan el día a día, el viaje de egresados, las cosquillas en el estómago de la adolescencia y que no tengan la responsabilidad y el compromiso del trabajo como tuve yo”.Revista HOLA