La increíble historia de una mujer que fue mamá mientras a su hija mayor la operaban de un tumor cerebral

En medio de la pandemia y la cuarentena obligatoria, una familia de Coronel Moldes, ciudad cordobesa situada a 300 kilómetros de la capital, se enfrentó a una angustiante situación: Deolina, mujer de 35 años, y su pareja Ricardo, de 36, tuvieron fueron padres mientras su hija mayor Guadalupe se sometía a un tratamiento de rayos para vencer un tumor cerebral. "No podía disfrutar el nacimiento de mi tercera hija, porque mi primera hija estaba al borde de la muerte", relató la madre.

Todo comenzó a fines de febrero cuando Guadalupe, de 13 años, empezó a tener dolores de cabeza y vómitos. Ante ello, los médicos ordenaron realizarle una resonancia que informó que padecía un tumor cerebral. Durante un mes, la nena se sometió a cinco operaciones pero sin éxito. "Había un líquido en su cerebro que complicaba todo. Los médicos nos decían que el tumor crecía día a día", contó la mamá a Infobae, quien comentó que su hija tuvo que trasladarse al Hospital de Niños de la ciudad de Córdoba para continuar con la atención médica.

Así, la familia se mudó a la capital cordobesa y dejó a su segundo hijo Felipe, de 3 años, a cargo de los hermanos del padre. "Estaba con una panzota enorme y preocupada por la salud de Guadalupe", indicó Deolina, embarazada de siete meses por entonces. Según afirmaron, tuvieron que quedarse a dormir en el hospital ya que no tenían dinero para alquilar una casa. "Dormíamos en los pasillos y en los asientos de la sala de espera. Con mi embarazo tan avanzado, no podía ni dormir en la silla, no encontraba posición. Y apenas comíamos sandwiches de miga que nos daban en la cocina del hospital, con mucha pena", señaló.

Finalmente, el primero de abril nació Sofía luego de que la Casa de Ronald McDonald ayudara a la familia dándole un lugar para vivir en la residencia que tiene la fundación en Córdoba. "Estaba en la habitación, viendo tele, cuando me empecé a sentir rara y rompí bolsa", recordó la mujer. "Tuve que estar todo el tiempo sola por los protocolos de cuidados del Covid-19. A mi marido no lo dejaron presenciar el parto y acompañarme en ese momento. Sofi nació por parto natural en plena cuarentena. Luego de hacerle los primeros estudios, se acercó una médica y nos informó que había nacido con Síndrome de Down", explicó luego Deolina.

Por su parte, Guadalupe continua con un tratamiento de rayos para vencer al tumor, el cual pareciera resultar exitoso. "Ella está muy tranquila y con la expectativa de volver a su casa y al colegio en Coronel Moldes. Esperando ansiosa el reencuentro con su hermano, sus abuelos, primos y tíos", concluyó la mamá de la familia en declaraciones a Infobae. Mientras tanto, continúan en la Casa de Ronald.