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31/03/2020

Coronavirus: Cómo se prepara la ciudad de Bs As para su pico máximo, por María Belén Aramburu

El gobierno de Horacio Rodríguez Larreta tiene distintos escenarios planteados

Coronavirus: Cómo se prepara la ciudad de Bs As para su pico máximo, por María Belén Aramburu

Así como cada uno de los distritos del país se prepara para que su sistema de salud esté preparado de la mejor manera posible para lo que será su pico máximo tomando medidas preventivas al unísono de lo que hace el resto y en consonancia con la Nación, la ciudad de Buenos Aires está adoptando las propias, atendiendo a que la mayor parte de los infectados se encuentra en este distrito.
 
El pico máximo de infectados se espera para fines de abril y podría incluso llegar a principios de mayo según estimaciones del Ministerio de Salud del gobierno de la ciudad a cargo de Fernán Quirós.
 
El gobierno de Horacio Rodríguez Larreta tiene distintos escenarios planteados. En el peor probable escenario se calculan 2.000 personas infectadas de manera leve por día, 600 moderados y 200 en situación crítica o grave. Reitero, en el peor escenario que se pueda plantear.
 
En ese escenario y, encontrándose imposibilitadas las personas que padezcan la enfermedad aún las que la presenten en su estado más leve, de estar en contacto con otras, éstas serán ubicadas en hoteles siendo que en su condición ya que su condición carecen, en sus domicilios particulares, de las condiciones de asepsia e higiene constantes requeridas, no pudiendo con un tratamiento patogénico acorde con esta enfermedad.
 
Los indicadores mundiales dan cuenta de un 80% de casos leves que presentan una sintomatología semejante al resfrío común combinado con alguna molestia. La modalidad de su permanencia en hoteles se debe a que, de este modo no estarían ocupando camas para casos más graves y se evitaría el contagio a personal de la salud, sensiblemente necesario en momentos de mayor crecimiento en el número de infectados.
 
Los casos moderados, 600, estarán ubicados en internación general que cuenta con 400 nuevas camas, y los graves en terapia intensiva con disponibilidad de entre 150 y 170 camas más.
 
Siendo que los mayores de 70 años han demostrado ser la porción de la población más vulnerable en el mundo en cantidad de víctimas fatales, la preservación de su aislamiento es un hito importantísimo a considerar y cumplir. El distanciamiento desde ya contempla el cuidado afectivo y la presencia del Estado en los casos monoparentales preferentemente.
 
El testeo es clave. Y la cantidad de casos difundida, se sabe, es menor a la real. Están los que no consultan aunque tengan síntomas similares a los del coronavirus, además de los que son asintomáticos y, como tales, contagian, encontrándose por ende, fuera del sistema de salud. Habría que sumar a los que se encuentran bajo investigación epidemiológica a la espera de los resultados de los tests realizados.
 
Cada persona infectada contagia a 4, según estimaciones de Quirós, así que en base a estos datos se puede hacer una proyección a escala de su crecimiento exponencial. Tratándose de un virus de un comportamiento desconocido, sin medicamento o vacuna que lo alcance, se agrava el panorama. Los valores que permiten su cálculo tienen su ascenso en el séptimo día, por lo que entre el día 7 y el 14 se puede detectar el coronavirus. Calculemos además que cada avión que traía pasajeros del exterior, de las zonas establecidas por la OMS como de riesgo, había entre 4 y 5 pasajeros infectados que, a su vez, habían contagiado a otros, por lo que números de infectados se incrementan.
 
Siendo que entre el 50 y el 55% de los casos a nivel nacional se han registrado en personas procedentes de zonas consideradas de riesgo, los recién llegados al aeropuerto internacional de Ezeiza con domicilio en la ciudad de Buenos Aires son derivados a hoteles para cumplir con el aislamiento obligatorio. Algunos con reclamos legítimos en cuanto a sus necesidades que desde ya deben ser atendidas y otros con exigencias de servicio hotelero, siendo que este confinamiento no es de estadía turística en un hotel, los porteños nos aseguramos que los que llegan del exterior no circulen por la ciudad evitando nuevos contagios en caso de ser enfermos sintomáticos o asintomáticos.
 El testeo frecuente brinda una identificación precoz. Ante la consulta sobre los tests llamados rápidos y cuya eficacia se puso en duda recientemente por tener una sensibilidad de apenas un 30%, el Ministerio de Salud del gobierno de la ciudad, si bien destaca como de mayor calidad además de costo la técnica PCR a través del hisopado, por ser indispensable para la gestión clínica, considera su practicidad a la hora de utilizarlos en la detección de la enfermedad en profesionales de la salud y policías que están permanentemente expuestos al virus por sus tareas.
 
Con la descentralización del gobierno nacional de los testeos en el Instituto Malbrán, contará con los hospitales Muñiz, de Niños, entre 6 centros públicos de atención además de 4 privados, por lo que contará con un total de 10.
 
Ante la consulta de un pico estimado a fines de abril, pudiéndose extender en el tiempo a principios de mayo, con la cantidad de casos señalados, y su superposición con pacientes con afecciones respiratorias principalmente por la época del año y otras afecciones, el gobierno de la ciudad estima que su sistema de salud está preparado para atender todos los casos entre centros asistenciales públicos, privados y hoteles acondicionados a tales propósitos.
 
En cuanto a la atención hospitalaria que se podría brindar a pacientes del conurbano bonaerense, la ciudad podría recibir la misma cantidad que atiende regularmente, estimada en el 30% de ocupación del sistema hospitalario. De todos modos, el aislamiento reinante por el momento, evitando la circulación de personas, amortiguaría el impacto.
 
Otro elemento de prevención serán los módulos a establecerse en los hospitales de modo de evitar que estos potenciales pacientes infectados por el coronavirus circulen por el centro asistencial. Allí se realizarán los tests y, de resultar positivo, se derivará al enfermo a un hotel u hospital, dependiendo de la levedad o gravedad del caso. De esta manera se instaurará un circuito independiente para el sistema ambulatorio.
 
Calculando entre 100.000 y 300.000 infectados en este distrito en el momento de alcanzar su pico, nos preguntamos cómo se puede mejorar el escenario y cuándo podría finalizar el aislamiento.
 
Las dos preguntas se responden con la misma respuesta.
 
Resultando el coronavirus de un contagio vertiginoso, nunca antes visto, en un mundo interconectado, con la implementación de estrategias clásicas que no han funcionado al compás de lo esperado, la estrategia que la ciudad tiene prevista es la de supresión. Esta estrategia se lleva adelante con el aislamiento social, preventivo y obligatorio, asumiendo medidas en conjunto con otros distritos y la Nación, el testeo frecuente y el distanciamiento social de los adultos mayores. Basada en estos tres pilares se pretende no sólo llevar para más adelante en el tiempo el pico máximo de casos, sino que éstos se manifiesten en menor cantidad que la hipótesis del peor escenario planteado y expuesto en esta editorial.
 
Cuándo volver a la vida “normal” y la rutina anterior, aunque hago un paréntesis con esto remitiéndolos a editoriales anteriores que escribí para @Haceinstantes donde planteo que nuestra vida ya no será la misma, dependerá de la responsabilidad individual y social en el cumplimiento de las medidas adoptadas por el gobierno tanto distrital como nacional.
 
El concepto de interés individual versus el colectivo, en palabras del Ministro de Salud del gobierno de la ciudad, se desdibuja ante el planteo de que si no cuidás al colectivo, éste también repercute en el individual, agregando que el 70% de la cura depende del comportamiento social.
 
Hasta que haya aparecido la vacuna.
 
Hasta que entendamos que la vacuna es quedarse en casa y cuidarse.

 

Por María Belén Aramburu

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