viernes 19 de abril de 2024
Cielo claro 17.5ºc | Buenos Aires
22/02/2018

#EditorialHi: "Bajo el paraguas de Moyano", por María Belén Aramburu

#EditorialHi: "Bajo el paraguas de Moyano", por María Belén Aramburu

Bajo el paraguas de Moyano se realizó la convocatoria.Bajo el paraguas de Moyano se realizó la movilización.Bajo el paraguas de Moyano se vieron marchar columnas de distintas organizaciones políticas, sociales y sindicales.Hasta los partidos de izquierda dijeron presente, aunque admitieron que lo hacían de manera independiente. Bajo el paraguas de Moyano aparecieron las organizaciones sociales y el dirigente de la CTEP, Juan Grabois, de reconocida relación con el Papa Francisco, quien busca, dijo, una "alianza táctica".Bajo el paraguas de Moyano los dirigentes sindicales pidieron un paro. El paro no fue convocado, pese a que no se descartó. ¿Quién lo puede y/o tiene que convocar? Orgánicamente, Moyano no pertenece al Triunvirato de la CGT, del cual sólo Juan Carlos Schmidt estuvo entre los del palco convirtiéndose en el primer orador. Ni Carlos Acuña ni Héctor Daer, como se sabía, asomaron siquiera una palabra de apoyo. El paro tendría por el momento una fecha incierta pero la voluntad de hacerlo es férrea. Las dos CTA, los partidos de izquierda y gran parte de los dirigentes sindicales la quieren. Los trabajadores la exigen. Y el mes de marzo será de definiciones. ¿Fue una marcha de las bases, de los trabajadores? Mi respuesta es un sí rotundo. En los últimos tiempos aparecieron delegados representantes de los trabajadores despedidos que no encontraron eco de sus reclamos en las cúpulas dirigenciales. Aún más, las criticaron por su ausencia en los momentos más difíciles. Y si bien fue una movilización de los trabajadores en su protesta contra las medidas económicas del gobierno nacional, la marcha, para muchos, fue "la marcha de Moyano". Todo indica, como la dirección de una flecha, que el camino hacia el reclamo desde la oposición, irá de la mano de Moyano. Hasta el senador Miguel Ángel Pichetto aclaró que, para el tratamiento parlamentario del proyecto de reforma laboral, consultará con Moyano. Y hasta el mismo Moyano se autoreferenció al al establecer que si el Presidente Mauricio Macri lo convoca se reuniría con él, para lo cual no tardó en llegar la respuesta de parte del ministro de Trabajo Jorge Triaca para aclararle que están dispuestos a hablar pero "sin condicionamientos ni extorsiones". Los dirigentes sindicales que no se movilizaron al compás de Moyano se han acercado más al gobierno. Este paso, si bien también tiende a dejarlo solo a Moyano, demuestra que en este afán, lo dejan solo como opositor sindical y referente de los políticos. Se queda como el sindicalista que solo y poderoso enfrenta al gobierno. Porque, por más que lo acompañen, siempre aparece su paraguas que convoca y moviliza. Y se esgrime como el opositor que pretende sentarse a dialogar con el gobierno. ¿Qué viene ahora? En el sindicalismo, una reestructuración. En primer término de la CGT. La ruptura del Triunvirato quedó evidenciada, ya no se pudo tapar más, menos con una mano, y se deberá llamar a elecciones lo más rápidamente posible. Los que proclaman un unicato o conducción única, ya lo han hecho a favor de Moyano. ¿Volverá a la CGT? Las dos CTA además de su propia unidad, buscan su integración a la central de los trabajadores. Este tema es orgánico pero vinculado con el fondo de la cuestión. Y el fondo es la defensa de los trabajadores. En vísperas de un proyecto que flexibilizaría el mercado laboral, las bases están atentas al comportamiento de las cúpulas para hacer frente a los vaivenes de la economía signada por la inflación y paritarias que aún no se definen y amenazan los bolsillos y el poder adquisitivo de los asalariados con un tope del 15% sin cláusula gatillo. Ya no es el Moyano que se fue a liderar Independiente. Volvió el Moyano sindicalista y combativo, el que con Ubaldini le hizo trece paros al gobierno de Ricardo Alfonsín, la Marcha Federal a Carlos Menem, la denuncia por la llamada Ley Banelco en medio de un debate parlamentario de un proyecto de flexibilización laboral bajo el gobierno de Fernando De la Rúa, y que enfrentó a Cristina Fernández de Kirchner durante su segundo mandato, luego de su luna de miel con Néstor Kirchner y el primer mandato de la ex presidenta. Con ella se sentaría a tomar un café. Bajo su propio paraguas, Moyano sigue enfrentándose a Mauricio Macri de manera personal, y defendiéndose de su situación judicial, aún desde el palco central de la movilización. El panorama que viene requiere atención. Habrá cambios políticos y sociales. Más allá de la lectura del ciudadano común, la de la dirigencia es fundamental para dirigir un barco que pretende tener un rumbo seguro ante el oleaje de la incertidumbre.Por María Belén Aramburu.

Te puede interesar
Últimas noticias